30 de agosto de 2007

Aguante, Puerto Rico

¡PUERTO RICO, AHÍ!


Vistos todos los resultados, hechos todos los análisis, leídas todas las columnas deportivas en los diarios… una conclusión: hoy es un día crucial. No, no hablo de nada personal, tampoco algo de vida o muerte, quizás de lo que hablo es irrelevante para algunos a mi alrededor. Sin embargo, estoy ansiosa y sé que somos muchos.
El baloncesto es nuestro deporte nacional y nuestra selección el equipo de todos.

PUERTO RICO TIENE QUE GANARLE HOY A CANADÁ.

Gracias a que Argentina (lindo Argentina) le ganó a Panamá, se dio el milagro y entramos a la segunda ronda. Gracias a Argentina (precioso Argentina que sabe empatar y ganar en tiempo extra) que le ganó a Brasil y por la excelente labor en conjunto de nuestro equipo, seguimos ahí. Y si hoy le ganamos a los del Norte, Puerto Rico irá a semifinales. Pero más importante aún, asegura ir a repechaje y tener opción para encontrarnos en Beijing 2008.
Si ganamos y en el mejor de los casos también ganará Argentina, podríamos ir a semifinales contra los gauchos (bello Argentina, ojalá nos sigan ayudando. aunque tengamos que vernos las caras en la recta final) Si ganara USA entonces nos mediríamos contra los gringos y ésos nos quieren hacer pagar con creces la derrota de Atenas. A menos que…
Si perdemos…(no llamemos al diablo) y en el peor de los casos también perdiera Venezuela... que nadie me hable esta noche. Porque nuestros canasteros estarán haciendo las maletas de regreso a casa y yo, una vez más diré: “ Odio el Básquet”. Hasta el próximo partido…
Oremos.. como decía el gurú… Vamos, Puerto Rico, ¡podemos!
¡Ayúuuuuuuuuuudalos, divina pastoraaaaaaaaaaa!


Nota:
¿¿¿¿¿Por qué &%#$ no dan estos juegos por televisión????????

27 de agosto de 2007

Peor es nada


Peor es nada
Cortometraje premiado
Cinefiesta 2007

Felicidades a todo el elenco y personal técnico del cortometraje “Peor es nada” que anoche ganó tres premios en el certamen internacional Cinefiesta 2007. (Ver entrada relacionada - 22 de agosto)
Los jóvenes obtuvieron el premio al mejor cortometraje a nivel nacional que consta en un donativo de $10,000 de la Corporación de Cine de Puerto Rico destinados a la producción de un nuevo corto. Pero además ganaron el premio “favorito del público” que nos deja saber cuánto gustaron a los asistentes a la actividad celebrada este fin de semana en el Museo de Arte de San Juan. Este cortometraje fue exhibido en la sesión del sábado a las 2:00pm y dio mucho de qué hablar y también de qué reír.
Felicitamos de manera especial a Noel Ernesto, quien ganó el premio al mejor actor nacional con el personaje de Paulino (galardón compartido con Israel Lugo) y a la directora Kathy García, eje de todo este proyecto soñador.

Un aparte de orgullo y emoción:
Tengo fe en la juventud de Puerto Rico. Tengo fe en que Puerto Rico puede hacer buen cine. Tengo fe en el talento y dedicación de nuestra gente. Tengo fe en el trabajo en equipo.


Tengo fe en ti, Noel. Te amo y estoy más que orgullosa de ti, como tu primera maestra pero sobretodo como tu mami. ¡Adelante, siempre adelante!

24 de agosto de 2007

Reacción solidaria a una denuncia obligada

"Bienaventurado el hombre
que no sigue las consignas del Partido

ni asiste a sus mítines
ni se sienta en la mesa con los gangsters
ni con los Generales en el Consejo de Guerra
Bienaventurado el hombre que no espía a su hermano
ni delata a su compañero de colegio
Bienaventurado el hombre que no lee los anuncios comerciales
ni escucha sus radios
ni cree en sus slogans.
Será como un árbol plantado junto a una fuente".
(Salmo 1 - Ernesto Cardenal)


En 1946, Juan Ramón Jiménez se preguntaba: "¿Quién será el poeta que llene lo que queda del siglo, como los cuatro citados* llenaron lo que va de una equivalente invasión temporal; el que levante y pase una nueva antorcha y, sobre todo, el que determine una poesía de verdad mayor? Para mí será un poeta libre, claro, de forma personal como la de los cuatro influyentes mayores; realista, pero trascendente; más sensual que Unamuno; más directo que Darío; más general que Antonio Machado; menos socorrido que Lugones; más optimista que Juan Ramón Jiménez; más sencillo que Gabriela Mistral; menos premioso que [Jorge] Guillén; más completo que García Lorca; más sano que Neruda; más unido que Alberti... Y si tenemos en cuenta la predicción de Henry A. Wallace sobre la era que se avecina, la del Pacífico, en la que yo creo firmemente, ese poeta -corona del siglo- deberá nacer en Hispanoamérica y del lado del Pacífico, que lo espera".

La respuesta llegó con el tiempo pues si alguien tomó esa antorcha y puede llamarse un poeta libre, trascendente, directo y completo es el nicaragüense Ernesto Cardenal. Un poeta comprometido, innovador, apasionado, vertical, honesto, nuestro.

Sesenta años después, entrevistado por el diario “La Nación” de Chile, a la pregunta de si había valido la pena ser parte del Movimiento Sandinista de Liberación Nacional, Cardenal contesta:

—Esos años fueron también importantes, porque fue el acompañar a todo un pueblo generoso y heroico en la transformación de un país. La revolución se perdió por la injerencia de Estados Unidos. Pero lo peor es que ese Frente Sandinista después se corrompió. Ahora es el “danielismo”, un partido sometido a un caudillismo férreo, el de Daniel Ortega. Yo, junto con muchísimos otros hemos salido de ese partido. Aspiramos a volver a aquella revolución. Pero, ¿cuándo será?, no sabemos.

Hoy corre por la red una carta enviada a los medios noticiosos:

"Me veo en la penosa obligación de denunciar ante Nicaragua y el mundo que me ha llegado la información de que el presidente Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo se han alarmado por la promoción (sin ninguna participación mía) de la candidatura al Premio Nóbel por considerar que soy un adversario; y que han decidido parar esta iniciativa lanzando una campaña de desprestigio contra mí, tanto nacional como internacionalmente por todos los medios a su alcance.
En caso de ser así yo estoy indefenso ante esta campaña del gobierno de Nicaragua y lo único que puedo hacer es anunciarlo antes de que suceda.
Son muchos los medios que el gobierno puede lanzar contra mí, y siendo muy fácil la presentación de falsas evidencias y falsos testigos y falsas pruebas, y estando todos los juzgados y las instancias judiciales y aun la Corte Suprema de Justicia bajo su control, ante esta impotencia en que me encuentro no puedo sino decirle a Dios como en el Salmo:
Sin motivo me pusieron una trampa,
hicieron un hoyo para que cayera en él;
que caigan en su propia trampa.

Managua, 21 de agosto de 2007
Ernesto Cardenal"

Es increíble que palabras como éstas hayan tenido que salir de la pluma del “más universal de los poetas vivos de la lengua española”, cuya obra ha sido traducida a veinte idiomas. Nominado en el 2005 para el Premio Nóbel de Literatura y por segunda vez en el 2007, todos los latinoamericanos tenemos que secundarlo. Este premio no cae en América Latina desde 1990 cuando fue recibido por el mexicano Octavio Paz. Nadie mejor que Ernesto Cardenal para representarnos.

Desde Puerto Rico, te respaldo, Poeta.


* Se refería a la influencia de Rubén Darío, Juan Ramón Jiménez, Federico García Lorca y Pablo Neruda

Para escuchar algunos de sus poemas: http://www.palabravirtual.com/index.php?ir=crit.php&wid=100&show=poemas&p=Ernesto+Cardenal

22 de agosto de 2007

Cinefiesta 2007

CREATIVA REPRESENTACIÓN BORICUA EN CINEFIESTA 2007

EL séptimo arte tendrá una amplia exposición local e internacional a partir de hoy, miércoles, con el inicio del Festival de Cortometrajes de Puerto Rico, “Cinefiesta 2007”.
La quinta edición de esta muestra, que comenzará en el teatro Raúl Juliá del Museo de Arte en Santurce y que se disfrutará también del viernes en adelante en las salas de Caribbean Cinemas de Las Catalinas Mall en Caguas, expondrá unos 80 trabajos hasta este domingo.
Rumanía, Israel, España, Corea y Singapur son sólo algunos de los países que competirán por los premios en metálico que se otorgarán a los mejores trabajos.
La representación puertorriqueña, a su vez, será bastante amplia este año con unos 10 cortometrajes.
Los directores puertorriqueños Alexis Ledesma, Kathy García, Raúl García y Noland Otero conversaron con Primera Hora sobre los trabajos que presentarán.
“Pasión cibernética”
Noland Otero, guionista y director; y el subdirector Raúl García traen la pieza “Pasión cibernética”, en la que exponen cinco historias como ejemplo de los problemas que puede confrontar un asiduo a la red interactiva.
Esta pequeña porción está respaldada por actores reconocidos del patio, como Kisha Tikina Burgos, Tita Guerrero, Pedro Telemaco, Jaime Bello, Ulises Rodríguez y José Eugenio Hernández, entre otros.
“Peor es nada”
La historia de Kathy García está apoyada por los jóvenes actores Emilio Suárez, Eduardo Rosado, Héctor Escudero y Noel Ernesto.
En “Peor es nada”, los noveles artistas interpretan a un grupo de amigos machistas que salen en busca de mujeres, pero se encuentran una sorpresa mayor. Es el primer proyecto de Kathy García como directora y formó parte de la clase de producción avanzada del profesor José Rodríguez de la Universidad del Sagrado Corazón.
Este invento ha tenido buenos resultados, pues cuenta que fue presentado con éxito en el “San Juan Cinema Fest” y ya se filmó su secuela, “Los panas arrested”, en la que se añadieron cuatro personajes.
“Pa’ ningún la’o”
Igualmente exitosos han sido los proyectos del director Alexis Ledesma, que el año pasado ganó una mención de honor por su trabajo “Cola universal” en “Cinefiesta”.
Este año regresa con “Pa’ ningún la’o”, una propuesta creativa de 10 minutos basada en la historia de dos amigos -personificados por Gilberto Arias y César Castillo- que deciden irse de paseo a la playa, pero antes deberán encontrar una buena canción en alguna emisora puertorriqueña.

Para información sobre éste y otros cortometrajes, puede acceder a la página www.thefilmfoundation.org. donde están también disponibles los itinerarios.
También, puede llamar a la Fundación de Cine de Puerto Rico a (787-635- 9163; 939-640-1124), al Museo de Arte de Puerto Rico (787-977- 6277) y a Caribbean Cinemas de Las Catalinas Mall (787-747-1415) para conocer los horarios.

(Resumen Texto: "Primera Hora"- 22 de agosto de 2007 _ Mariela Chalas)

ESTE SÁBADO, A LAS 2 DE LA TARDE, PRESENTACIÓN DE "PEOR ES NADA" EN EL MUSEO. ¡ADELANTE, MUCHACHOS! PUERTO RICO NECESITA DE CINEASTAS Y ACTORES JÓVENES Y ENTUSIASTAS COMO USTEDES QUE ECHEN HACIA ADELANTE LA EMPRESA NACIONAL (y no es cuestión de preferencia pero ¡Noel Ernesto es mi hijo!) ¡SUERTE! Y YA SABEN: ¡PÁ TRAS NI PÁ COGER IMPULSO!

20 de agosto de 2007

CANCIÓN INFANTIL PARA MIS NIETOS

Joan Manuel Serrat: Canción infantil...para despertar a una paloma morena

13 de agosto de 2007

¡Maldito Copani!

Copiaste la idea que tenía yo justo antes que yo misma la escribiera.
¿Cómo lograste escribir mis pensamientos?
¡Increíble homenaje, sencillo y abarcador!
Eres la voz de los serratianos.



Cómo lograste hacerme reír
y llorar y sentir que ya empieza la fiesta,
como lograste hacerme feliz
lejos de mi país que aplasta y apesta.
Cómo lograste en tu voz encender
al poeta de ayer, de tu España quebrada
y dime cómo la propia mujer
que yo quiero se fue detrás de tus palabras.
Maldito Serrat... Maldito ladrón...
Copiaste la idea que tenía yo
justo antes que yo mismo la escribiera,
maldito Serrat... Pero quién pudiera decir:
Ay... amor, sin ti no entiendo el despertar...
Ay... amor, sin ti mi cama es ancha,
Ay... amor, que me desvela la verdad,
entre tú y yo la soledad
y un manojillo de escarcha.
Cómo lograste hacerme sufrir
por Irene y Manuel y el adiós de Lucía.
Cómo lograste mentirme tan bien,
que hasta puedo creer que hoy va a ser un gran día.
Cómo lograste tanta precisión
describiendo a mi pueblo blanco y polvoriento
si el sacristán por ahí no te vio,
ni el cura, ni el cabo, ni el polvo ni el viento.
Maldito Serrat... Maldita canción...
Golpeando a las puertas de este corazón
que estará siempre de par en par esperando,
latiendo a tu ritmo, lo mismo que cuando cantaste:
Ay... Ay utopía...
Dulce como el pan nuestro de cada día.
Cómo lograste hablar tanto de mí
y los locos que aquí adoramos tu tema.
No hago otra cosa que pensar en ti
cuando quiero escribir y no nace el poema.
Cómo lograste a los tiempos vencer,
con mi padre fue ayer, con mis hijas ahora
que te agradecen por hacernos ver
que de vez en cuando la vida enamora.
Bendito Serrat... Hermano mayor
de todo el que quiera hacer una canción
de verdad, de este tiempo que empuja y arrasa
o de las pequeñas cosas que nos pasan.
Bendito Juglar, no apagues tu voz,
Qué hacemos nosotros, los de este rincón
sin oir en tu verso al amigo que abraza,
quién puede seguir y qué va a ser de mí
si estás lejos de casa.

Ignacio Copani

9 de agosto de 2007

Llamadas urgentes

Llamadas urgentes
Siluz

Guillermo había salido con más tragos en la cabeza de los que estaba acostumbrado. Ni las súplicas de su madre para que permaneciera en casa lo detuvieron. Tomó las llaves de su motora y sin mirar atrás, arrancó.

Emilio se retiró a descansar a su habitación. Sus riñones ya no respondían, los tratamientos eran largos y la espera se prolongaba. Con cada anochecer se extinguía una esperanza.

Dos llamadas rompieron la paz de la madrugada:

—Es necesario que venga al hospital. Su hijo ha sufrido un accidente.

—Es necesario que venga al hospital. Llegó un donante.

Cerca de la sala de operaciones, una madre ruega por la recuperación de su hijo. Mientras otra, en la morgue, se enfrenta al dolor de reconocer el cadáver del suyo.

8 de agosto de 2007

Boricua En La Luna

Roy Brown y Fiel a la Vega



Y así le digo al villano:
yo sería borincano,
aunque naciera en la luna".


Juan A. Corretjer (letra), Roy Brown (Música)

7 de agosto de 2007

Nuestra playa de Vega Baja


Nuestra playa de Vega Baja

"Las olas que dominan rocas
y las olas que susurran mansas
nacen de la misma mar".
I.M. Landrón (Cucubanos)

De niña disfruté esa playa. Siempre consideré que era la más hermosa entre las bellas. Su gran roca dividía aquel mar en dos, presentando de frente un paisaje sereno mientras a su espalda las olas irrumpían con fuerza. Olas del mismo océano. Olas que aquella piedra domesticaba para sus retoños vegabajeños.

Años después, cuando Vega Baja me recibió como hija, la hice mía. Arena, ambiente, peña, agua; toda ella me confirmó que seguía siendo la playa más bella de mi isla. Boquerón y Luquillo la retaban pero Puerto Nuevo era siempre vencedora.

Nuestro Puerto Nuevo. Nuestra playa. Mía y de todos los puertorriqueños. Mía y de todos los que nos consideramos vegabajeños. De los presentes y los ausentes. De los que vamos a nadar en sus aguas. De los niños que van a construir castillos en la arena . De las familias que van a compartir en sus alrededores. De los jóvenes que van a escuchar música. De los que vamos a comernos un bacalaito, un pincho o una alcapurria y a mitigar el calor con una “Medalla”. De todos los que al contemplar su belleza damos gracias al Todopoderoso de tener vista para admirarla, tacto para sentirla y oídos para escucharla.

Es nuestra porque lo ha sido siempre. Porque la playa de Puerto Nuevo es Vega Baja. Porque los Vegabajeños queremos que lo siga siendo. Porque no la vamos a entregar a los grandes inversionistas y desarrolladores. Porque la vamos a defender hoy como lo hicimos ayer y lo haremos mañana.

El pueblo marchó pasivo. Solo demandamos lo que creemos justo. Las playas de Puerto Rico son de los puertorriqueños. Marchamos frente a la roca donde las olas nacen y mueren en pacífica armonía. No nos obliguen a cruzar al dorso. Porque allí las olas golpean con furia exigiendo su espacio. Nos podríamos copiar.


No a la privatización. No a la entrega. Vega Baja defiende su playa.
Elsia Luz Cruz Torruellas

5 de agosto de 2007

El día señalado


“...allí la tierra está maldita;
corre el agua ensangrentada.”
Juan A. Corretjer


No podía conciliar el sueño. Me despertaba a cada rato, miraba el reloj; mi temor era quedarme dormido a última hora. 3:10. Habíamos quedado en encontrarnos a las seis en punto. Aún era temprano. Intentando descansar un poco, di media vuelta, me cubrí con la sábana y cerré los ojos. Hoy es el día. Hoy. Todo saldrá bien.

Raúl tampoco duerme, obligado a pernoctar esa noche en casa de Alex. Por vivir lejos y a falta de auto, su amigo decidió que era lo mejor. Era la única manera de asegurarse que no llegara tarde a la cita. Estaba incómodo , no tenía costumbre de dormir fuera de su cama y menos con aquellos ronquidos. Ojalá pasara todo rápido para estar ya de regreso en su hogar. ¿Qué hora sería? Sin atreverse a prender la luz (¿Cómo podía dormir Alex tan tranquilo?) buscó su celular. 3:10 vio en la pantalla. Faltaban menos de tres horas...

De súbito, me encontré en una playa desierta. Restos de minas abandonadas y residuos de objetos militares, sobresalen entre la arena. Acecho tras las ruinas de un viejo tanque. Sería un lindo paisaje, a no ser por las muestras de guerra regadas por todas partes. De las aguas surge la figura de una mujer, algo semejante a mi madre pero una imagen joven, como la recordaba de niño, con el pelo largo suelto y una amplia sonrisa. Traía una falda ancha de franjas rojas y blancas, una blusa azul cielo de volantes, los hombros al descubierto, una amapola en sus cabellos y entre las manos una estrella. Pum.. pum... pum... pum... Me tapé los oídos. No soportaba el ruido del tambor. Se aproxima un regimiento en marcha. A lo lejos, vi venir corriendo a Raúl. En ese instante, como en una carrera de relevo, Alex apareció a su lado y le pasa una pistola. Raúl apunta contra los militares pero Alex le hizo desviar el tiro y la bala fue a dar al mar. Histérico, corro hacia la silueta de mi madre, tropiezo contra una de las minas, se produce un enorme estallido y las aguas se tornan rojas. El mar ruge, crecen las olas, hasta arrasarlo todo: a mí, a ella, a Raúl, a Alex, a los soldados, al tanque y las minas. La playa se transforma en una masa gelatinosa inescapable. Grito. Abro los ojos. Tres números brillan frente a mi : 4:15.

Los ronquidos de Alex se hacen insoportables. Raúl se levanta. Camina por la habitación. Mira en su celular: 4:15. Observa a su alrededor. No sabe como Alex puede vivir en ese pequeño departamento. Sólo tiene allí su cama, algunos libros, su ropa. Va a la esquina que hace de cocina, espera que por lo menos haya algo de café. ¿Cuánto tiempo llevará Alex viviendo aquí? Le parece que no mucho. Se ve un sitio ajeno, sin recuerdos, sin marcas de vivencias. Lo conocía hace dos años y era la primera vez que iba a su casa. La había imaginado de otra manera. No sabía por qué, pero Alex no encajaba allí.

Me levanté de un brinco. No soportaba más. No podía respirar bien, los nervios me traicionaban. ¿Y si lo dejábamos para otro día? Llamé al celular de Raúl.
—Estoy nervioso. Hay muchos cabos sueltos.
—No creo. Alex ha organizado esto muy bien. Ya yo estoy listo, pero el loco éste todavía duerme a pata suelta.
—Despiértalo y vamos, antes de que me arrepienta.
Mientras me atragantaba un café recordé los sucesos de los últimos días.
—Tenemos que hacer algo. Esto de reunirnos a hablar y hablar, ya me está cansando —repetía Alex una y otra vez. En eso le daba la razón. Yo también pensaba que era demasiado el tiempo que consumíamos en la lectura de viejas teorías y escritores antiguos. ¿Por qué no hacer algo que llamara la atención? ¿Algo que apareciera en la prensa? ¿Alguna acción que diera a conocer en el extranjero el estatus colonial de nuestra patria? Hacerlo nosotros, aquí y ahora. Y así surgió la idea un domingo cualquiera, uno de tantos de los que Raúl y Alex pasaban en casa. Mi madre, que ya considerábamos de los tres, nos hacía el almuerzo mientras nosotros pretendíamos arreglar el mundo al ritmo de Roy Brown, Víctor Jara y Silvio Rodríguez. Desde el balcón, se disfruta la vista de la cordillera y en la cima de la montaña más alta, pueden observarse unas torres de comunicaciones que instalaron las autoridades federales hace varios años. Entre cerveza y cerveza, Raúl comentó cuán linda se vería una gran bandera patria ondeando en el pico de una de ellas. La de la estrella solitaria, sin la compañía obligada de las otras cincuenta. Las torres están ubicadas en un área restringida, y aunque se dice pertenecen a una radioemisora, era un secreto a gritos que formaban parte de un radar militar. —Pongámosla ,¿qué puede pasar? —dije emocionado. Y como quien se enfrenta a un nuevo reto en un videojuego, decidimos hacerlo esa misma semana. Quise invitar a dos o tres amigos más a la aventura, pero Alex se opuso. Varios días después, nos sorprendió con una nueva idea. —Ya que vamos hasta allá, aprovechemos el viaje. Explotemos la torre. Desde ahí seguro que los gringos espían a Fidel. —Así prendió Alex la mecha. Nos creímos guerrilleros salvadores, los Mesías de nuestro pueblo. Del sencillo hecho de colocar una bandera, ya destruiríamos aquel símbolo de dominio y opresión. Raúl tenía dudas de nuestro éxito y a mí me pareció un plan disparatado pero para ambos fue irresistible. Alex nunca flaqueó, quiso organizar todo y nos llenó de valor su seguridad. A los veinte años, soñábamos ser héroes y Alex supo hacernos pensar que era posible.

A las seis se encontraron a las afueras del pueblo. A esa hora, (todo a su debido tiempo, según Alex) comenzaron el recorrido, mochila en la espalda, como tantas otras veces en excursión a las montañas vecinas. Era común este tipo de actividad entre los jóvenes, por lo que a nadie le extrañó verlos salir. Poco a poco fueron bordeando los cerros, hasta acercarse al camino principal que daba al área restringida. Se adentraron en el bosque, buscando un espacio donde pudieran descansar, comer algo y observar, sin ser divisados. La presencia de su mejor amigo tranquilizaba a Raúl , disipando los fantasmas de la noche pasada. Así se dispusieron a esperar el momento apropiado.

El plan estaba claro. Alex había preparado unas bombas caseras, no ya para tumbar las torres sino para por lo menos sacar del aire el sistema. Y en lo alto, colocaríamos nuestra bandera. Vimos salir un camión militar, y nos dimos cuenta que solo había quedado un retén a cargo. Nos pareció que nos facilitaban las cosas. El soldado salió a fumar, Alex lo amarraría afuera mientras Raúl y yo aprovechábamos para entrar a la cabina. En efecto, nadie. Colocamos allí las bombas y corrimos hacia la torre para izar la bandera.

Fue entonces que se vieron rodeados. Les disparaban.
—¿Qué pensaban hacer hijos de puta? —Los labios de Alex arrojaron un grito—: Soy agente, no tiren. —Enseñó una placa.

Atónito, busqué a Raúl. Lo vi tirado en el piso. Se desangraba. Un agente lo amenaza con su arma. Sin disimular su rabia, la vacía en su cuerpo. —De alguna manera tendrán que aprender, terroristas de mierda. —y burlándose, orinó sobre el cadáver.

Ahora vienen por mí. Han retirado las bombas, que por alguna razón nunca explotaron. Me abrazo a mi bandera. Intento un grito: —¡Algún día flotarás sola! —Se me acerca el que parece ser el líder. Le escupo a la cara. Saca su arma y me apunta a la cabeza. Clavo mis ojos en los de Alex mientras lucho por reprimir una lágrima que a pesar mío, logra escaparse.

Veo en sus ojos el reflejo del rostro anonadado y lleno de angustia de mi madre. Una ola inmensa de sangre impacta con tal fuerza esa imagen que hace estallar en mil pedazos la estrella que carga entre sus brazos y a la vez, me golpea aniquilante.


(A la memoria de Carlos Soto Arriví y Arnaldo Darío Rosado)


Elsia Luz Cruz Torruellas
(Siluz)

4 de agosto de 2007

Amigos virtuales y reales




AMIGOS VIRTUALES Y REALES




Sin duda, una de las mayores satisfacciones al viajar es conocer amigos hechos a través de la red. Aunque la palabra correcta no es conocer. En realidad ya nos habíamos conocido a través de los talleres literarios y el chat. Ya habíamos compartido música, escritos, pensamientos, ideas. La diferencia fue ver nuestros rostros, mirarnos a los ojos, poder darnos un abrazo. Saber que no hay distancias y que tras esa pantalla hay una persona tan real como nosotros mismos, con nuestras mismas preocupaciones, intereses, habilidades, objetivos y problemas. ¡Qué pena que no siempre tuve una cámara! Pero los recuerdos permanecen.

Lo que sí es correcto es llamarnos amigos.