¿Será cierta la frase? No lo sé, pero sí sé que tejer, a dos agujas o a crochet tiene muchas ventajas, no solo motoras. Mientras tejemos, nuestra mente está alerta, concentrada, y eso de por sí, ya es un gran beneficio. Nos distrae, nos tranquiliza, reduce la tensión y el estrés, desarrolla nuestra creatividad, ordena nuestros pensamientos, ejercita el cerebro y aleja las enfermedades. Pero además nos da un gran espaldarazo de auto-estima cuando vemos nuestra obra terminada, y más aún cuando nuestros amigos y familiares modelan nuestras creaciones.
No soy una experta, más bien "toco de oído". Pero toda la vida vi a mis mayores tejiendo y la casa adornada con tapetes, manteles y colchas. Poco a poco, seguí sus pasos, o más bien, sus dedos, y así brotaron gorros, adornos, colchas, carteras, frisitas, botines...
Para muestra, un botón basta. Gracias a mis hijos, nueras y nietos por usar todo lo que esta doñita le da con regalarles.
y hasta el día que así tejamos,
por ahora seguimos de la forma tradicional:
1 comentario:
Siluz, bellos trabajos los que les has hecho a tu familia. Cariños, amiga
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