3 de octubre de 2013

Un dia de "homeschooling"

Son las 7:45 am.  Desde mi cuarto, aún en bata de dormir, escucho a mis vecinos gritándoles a las nenas que se den prisa. Oigo que meten bultos a la guagua, niñas ya listas, vestidas  y peinadas, para ir a la escuela. Nahuel duerme. 
No tengo duda que esta es una ventaja de que estudie en casa. Se despierta cuando no tiene sueño, con una sonrisa, con deseos de vivir un nuevo día y la pregunta: ¿qué vamos a hacer hoy?  En sandalias, sin peinarse aún, vamos al pequeño huerto, echamos agua a las matas, vemos su progreso, conversamos.  Y aún en pijama, a desayunar.

Nuestro horario es flexible, nadie nos impone clases fragmentadas ni un orden fijo, ni tocan timbres cada cincuenta minutos que nos limiten.  Podemos estar horas estudiando las frutas y los vegetales, y usar el tema, para conocer  las diferencias, las propiedades, las ventajas de consumirlas, la siembra, sumarlas y restarlas, aprender sus nombres en inglés y su correcta ortografía en español, usarlas en oraciones completas, dibujarlas, hacerlas en plasticina, etc.  
Estudiamos la historia de Puerto Rico.  Nahuel conoce a Oscar López, a Mariana Bracetti, el Grito de Lares, el verdadero himno de Puerto Rico, el azul de nuestra bandera,  porqué desaparecieron nuestros taínos.  Intentamos mostrarle el otro lado de la historia, que conozca también la versión del conquistado, no solo la que escribe el conquistador.

Leemos, comentamos, cantamos, dramatizamos, dibujamos.  Daríamos un gracioso espectáculo a quien nos viera imitando cómo se reconocen los murciélagos: él, un bebé murciélago y yo la madre que había ido a buscar su alimento.  O convirtiéndonos,  yo en el Sol y él en la Tierra que gira a mi alrededor.  Hablamos de temas de actualidad, de descubrimientos espaciales, de mitos y leyendas, de nuestra identidad latinoamericana, de los seres vivos, de valores, arte, música, poesía.
No tenemos que ir al mismo nivel en todas las materias.  Puede ir a su propio ritmo.  Si tiene habilidad para las matemáticas,  y puede seguir avanzando, ¿por qué limitarlo a lo que se supone que se cubra en un grado?  O si tiene dificultad en otro tema, ¿por qué no tomar ese con más calma hasta que lo comprenda?  Nuestra meta no es pasar de grado, es aprender.



Puede utilizar los recursos tecnológicos y la biblioteca, cuando quiera.  Si quiere más información sobre algún tema, va de inmediato a la enciclopedia o a la computadora. Tiene sus libros de referencia al alcance, igual que los buscadores virtuales.   Y si es importante que los sepa usar, más lo es el que lo quiera hacer.  Innumerables veces me pide buscar vídeos sobre el espacio, los planetas, las estrellas más grandes que el sol, el Big Bang, las supernovas, otras galaxias.  Y la interrogante que siempre aparece: ¿estamos solos en tanta inmensidad?

El aprender puede ser divertido. Buscamos la forma de hacer ejercicios y proyectos amenos, de jugar aprendiendo, de usar expresiones artísticas.  De que estudiar sea una tarea agradable y gratificante por sí misma, no una competencia o  una imposición. No recibe castigos ni humillaciones por no entender algo, no tiene miedo de preguntar, nadie se burla de él ni le hace bromas pesadas,  no sabe lo que es "bullying", no necesita sacar una determinada calificación ni pasar un examen.  No hay nervios ni presiones innecesarias. Para enfrentarse al mundo, habrá tiempo.  Y estará más preparado para hacerlo con la seguridad y confianza que le dé el haber tenido una infancia feliz.
No todos los días amanecen iguales. Tampoco nosotros. Hay días que estamos más enérgicos que otros, hay días que cubrimos muchos temas, hay días que apenas nos da el tiempo para nada. Hay días que estamos más receptivos, hay días en que nada parece funcionar, hay días que queremos hacerlo todo, hay otros en que solo queremos descansar y charlar. Pero aún de  una película, un juego, una conversación, podemos aprender tanto. 

Cuando nos preguntan ¿y la socialización?,  me pregunto;  ¿de qué socialización hablan?  De estar sentado al lado de un grupo de niños toda una mañana, escuchando, callando y escribiendo.  ¿Por qué tenemos que socializar con unos niños con los que lo único que tenemos en común es nuestro año de nacimiento?  Y sí, entiendo que hay que compartir.  Nahuel lo hace muy bien, no solo con niños de 6 años, como él, sino también con adultos jóvenes y mayores, adolescentes, niños de otras edades.   Y para desarrollarse adecuadamente están los talleres de teatro, los equipos de deporte, las clases de música, las excursiones por la isla, las actividades familiares.




Hay grupos de apoyo para los “homeschoolers”.  Hay muchísimas páginas que nos ayudan, que nos orientan.  En especial, recomiendo: http://prhomeschooling.blogspot.com para los que necesiten información sobre la Educación en el Hogar en Puerto Rico, su legalidad, así como enlaces de diferentes asignaturas. Hay también muchísimos recursos , material de referencia, juegos y ejercicios; entre ellos:

Orientándonos,  hemos formado  nuestro propio currículo, de acuerdo a nuestra realidad, creencias, edad, intereses, habilidades, adaptando los cursos tradicionales, probando métodos, buscando y descubriendo.  Cada día es un escalón, lo subimos gateando, nos sujetamos de los pasamanos, si caemos nos levantamos y  reintentamos, hasta que llegamos al próximo escalón con la mirada puesta en la meta.

Es agotador sí, lo es.  Quizás más para la maestra que para el pupilo. Se necesita mucha paciencia, calma, organización del tiempo, constancia, tolerancia para aceptar las críticas y fe en lo que hacemos.
Y no siempre marcha todo sobre ruedas.  Más bien, aprendemos en la marcha.  Él y yo.  Nos equivocamos, pues volvemos a empezar.  En fin, no hay supervisores que nos evalúen, no hay miedo a perder el trabajo o a que nos regañen¸ no hay un libro que completar o un manual dictador.  Tampoco es que no haya disciplina y orden pero nos lo dicta el sentido común, la lógica, el aprovechamiento natural del tiempo y la innata curiosidad del niño.
En fin, creo que estamos educando. Y nos sobra tiempo para jugar. Y abrazar. Antes que llegue la noche y  surjan nuevas preguntas. Y sus dudas no me dejen dormir buscando la forma en que encontraremos las respuestas.  Mañana será otro día.  

11 comentarios:

Hilda Vélez Rodríguez dijo...

Suena bien y cansado e interesante.

Anónimo dijo...

Me encanto. Yo no soy madre homeschooling pero las sigo muy de serca. Si, tengo un hijo que le encanta estudiar y aprender y una chica de dos anos que es toda una artista. Siembre busco cosas nuevas que hacer con mis hijos que les fomente el amos a la tierra, el respeto a los demas y confianza en si mismo.

Ivonne Acosta Lespier dijo...

¡Qué envidia me da tu experiencia! Eres bien valiente porque hay que tener mucha seguridad en uno mismo para emprender esa tarea.
Te felicito y deseo que todo siga super bien. Estoy segura de que Nahuel va a ser un joven mucho más seguro, maduro y educado que los que han ido a la escuela tradicional. Conozco dos casos al menos en que los resultados han sido maravillosos. Un abrazo..

Siluz dijo...

Es así, Hilda: un reto interesante, agotador pero gratificante.
Anónimo, en cierta forma, todas las madres dan "homeschooling", al ayudar a los hijos en sus tareas, y enseñarles todo lo que no cubre la escuela, incluyendo esos valores tan importantes que mencionas.
Ivonne, no se si valiente o atrevida, pero fue un reto que acepté no sin cierto miedo. Espero que tus palabras sean proféticas y los resultados que esperamos se den.
Un abrazo a las tres. Gracias por comentar.

Olga Cortez Barbera dijo...

Siluz, qué interesante esa manera de enseñar y aprender. Nahuel, con los que están en el mismo proceso,marcará la diferencia.

Jennifer Viera dijo...

Te felicito me a facinado todo lo q has echo. Llevo tiempo pensando en tomar la decision de educar a mis hijos en casa. Mi sobrina sufrio de bulling y fue horrible. Y decidi hacerlo mis hijos estan en una escuela q debo hacer antes de sacarlos de la escuela y comenzar a enseñar en casa? Hay algun procedimiento. Espero me puedas orientar. Este es mi correo. jeri_zael_20@hotmail.com. Gracias

Siluz dijo...

Así es, Olga, interesante tanto para él como para mí. Y creo que sí, que está dando frutos.

Siluz dijo...

Jennifer, según entiendo, los trámites para sacarlo de la escuela es igual que si lo cambiaras de escuela. Solo tienes que especificar en el documento que lo pasas a escuela en casa. De hecho, leí que ya el documento oficial ofrece esa alternativa, solo tienes que marcarla.

Unknown dijo...

Hola, muy intersante y bonita la experiencia, pero me quedan unas dudas que espero puedas compartir. ¿cómo son los trámites para revalidar esta educación? ¿hasta cuándo piensas realizar el Homeschooling? es decir, hasta qué grado. Saludos, gracias por compartir.

Siluz dijo...

Ruth, en Puerto Rico no hay que inscribirse en ningún registro ni tomar exámenes de ubicación pues el "homeschooling" es un derecho y está respaldado por las leyes. Solo tendría que hacerlo si el niño regresa a la escuela tradicional o al momento de pedir admisión a una universidad.
Hasta el momento (4 años después de esta entrada) continuamos y estamos contentos de los resultados. Nahuel, mi nieto, iría para un quinto grado. Nuestros planes son continuar mientras ambos podamos y queramos. No nos hemos arrepentido de la decisión tomada. Ni él ni sus padres ni yo.
Gracias por comentar. ¡Saludos!

Anónimo dijo...

Hola estoy muy interesada en el tema estoy pensando hacerlo con mi nieta.